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Iniciar una obra, por pequeña que sea, requiere planificación y conocimiento. Aquí te contamos los errores más frecuentes y cómo puedes evitarlos:
1. No definir el alcance del proyecto
Comenzar sin un objetivo claro lleva a confusión, cambios de última hora y desperdicio de recursos.
Solución: Elabora un plan básico con metas, responsables, cronograma y presupuesto.
2. Comprar materiales sin asesoría
Comprar por precio y no por calidad o función es un error común.
Solución: Busca asesoría técnica en puntos de venta confiables como El Nogal S.A.S.
3. Calcular mal las cantidades
Faltantes o excedentes implican pérdidas de tiempo y dinero.
Solución: Usa fórmulas básicas o pide apoyo para estimar con precisión.
4. Ignorar el clima o el entorno
La humedad, el sol o el terreno pueden afectar la calidad del trabajo.
Solución: Protege materiales y adapta los métodos de construcción al contexto.
5. No tener normas mínimas de seguridad
Improvisar pone en riesgo a las personas y la obra.
Solución: Aplica medidas básicas: cascos, botas, señalización, herramientas en buen estado.
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